DEO GRATIA
KEVIN
Nuevamente el himno de la vida hoy vibra en ti con su mejor canción. la canción que inventa en cada ser que como tú revela los designios de Dios por volver a nacer en su imagen y semejanza, un hombre.
Con sólo esa forma, tan normal por cotidiana, repite el mayor milagro de su creación:
Un hombre. Dueño y señor de todo lo creado, endeble en su estructura, indestructible en su espíritu, un segundo más en el tiempo, una gota más en el océano de la humanidad. Si, pero un segundo y una gota distinta a las demás en la magia de cada mente, en el insondable misterio de cada alma.
Tu tiempo y tu memoria llegaron por su designio en anticipo al mejor escenario de su Obra: primavera; viajero de los últimos vientos que acariciando dormidos troncos arrancan los renuevos y las flores, inician nuevos trinos en las ramas y las visten de nidos y esperanzas; tras de ti arribarán las golondrinas y los llantos del cielo por los campos, te saludan lejanas las estrellas y te brindan los grillos su concierto. Eres canto, eres brote, eres perfume, eres ala, eres soplo de Dios vuelto a la tierra.
Has llegado a la tierra con los vientos de marzo, agorero presagio de gentil primavera, has llegado en tu viaje a ocupar el espacio que guardaron las horas en quehacer milenario reservándole un sitio a tu nuevo milagro.
Viajero sideral que arriba al mundo trasunto de los campos Asturianos, de las límpidas aguas de Bizkaia, del desierto y las selvas de ésta tierra, nieve y roca boreal y mediodia, abeto y cardo, substancias que le dan a tu estatura una imagen de hielo pirenaico, fuego y sangre del sol por Mexicano, la dulzura del Cristo Dios y Hombre, la Leyenda y el mito de Quetzalcóatl.
Francisco Artolózaga Noriega
4 de Marzo 2002